Deberíamos ser más osados. Tener un mejor
autoconcepto de nosotros mismos. Mirar los retos de frente y con confianza. Ser
capaces de coger a “lo nuevo” y darle cobijo en nuestra vida sin ninguna duda.
Entender que lo que somos en el momento actual, sólo es circunstancial y que
vivimos un proceso de cambio que nos va a llevar a un nuevo yo, de un
rendimiento superior.
Pero por desgracia esto no es así. El ser
humano esta genéticamente programado para la supervivencia, para conservar la
vida, y por eso existe el miedo, el cual te avisa de que estás en una situación
desconocida, incómoda, a la que nunca te has enfrentado, y hace que no quieras
abandonar tu zona de confort, para no exponerte a los peligros.
Cuando nos proponemos alguna meta, cuando
comenzamos algún reto, cuando pensamos en nuestro futuro, rara vez predominan
en nuestra mente pensamientos de confianza, situaciones en las que nos podamos
ver consiguiendo grandes logros o viviendo nuestros sueños. Al contrario, nos
surgen pensamientos negativos, pensamos que no somos capaces de realizarlos, nos
ponemos a imaginar mil y una razones por las que estos sueños nunca se lograrán.
Incluso nos consideramos unos osados por sólo pensar en ellos.
En multitud de ocasiones las ilusiones se
desvanecen a causa de ese miedo. Pero
este miedo se puede vencer, nunca desaparecerá totalmente, pero se puede
convivir perfectamente con él. Sólo necesitas que se den dos circunstancias,
muy sencillas:
-
Que el sueño sea lo
suficiente grande y motivador. Nunca hay que dejar de soñar. Los sueños mueven
el mundo y garantizan el cambio. Pero soñar no es simplemente imaginarse una
situación. Cuando un sueño es grande y motivador, no sólo lo imaginas, también lo
sientes, lo visualizas, eres capaz de “predecir” como sucederá, quién te
rodeará cuando lo alcances. En definitiva, eres capaz de vivir el sueño.
- Realizar pequeñas y continuas acciones que cada día te acerquen más a
ese sueño. No tienen que ser grandes actos. Al contrario, los grandes actos producen
miedo, te paralizan, te alejan de tu sueño. Tienen que ser acciones que puedas
controlar perfectamente, que te “mejoren” y que consigan que ese sueño se
acerque a ti de una manera uniforme.
Todos tenemos sueños. Os animo a que tengáis más,
ya que es lo único que garantiza el progreso. Os dejo un video de Elsa Punset
que explica cómo conseguir los sueños a partir de la visualización, una gran
herramienta para lograr lo deseado.
Muy bueno Manuel, ya había visto el video. Me quedo con lo de "construir los sueños poco a poco".
ResponderEliminarGracias Alvaro, ¡vamos a por nuestros sueños!
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