No me deja de sorprender las
personas. Como son capaces de arriesgar tanto, lo arriesgan todo, arriesgan su
vida. Y lo peor es que la arriesgan realizando cosas que no les hacen felices,
olvidando sus sueños y viviendo una vida que le marcan los otros.
“El problema no es que apuntamos
demasiado alto y fallamos,
Sino que apuntamos demasiado bajo
y acertamos”.
Miguel Angel
Hasta donde yo sé, todas las personas cuando llegamos a
este mundo nos dan el mismo número de vidas que gastar, ¡Una! No hay más. Esto
no es un videojuego que si vas pasando pantallas puedes encontrar un porción
mágica que te da otra vida.
Teniendo esto claro, no entiendo porque
hay muchas personas que están en espera continúa intentando que llegue esa
pantalla donde aparezca algo que le cambie la vida, o postergando aquella
acción que le hace realmente feliz y que seguramente haga que su vida pegue un
giro de 180 grados y que al fin coja el rumbo correcto.
Realmente si se porque viven en
ese estado de congelación e inmovilismo. Por miedo a cuál será el resultado de
su decisión, a donde le llevará ese rumbo que podría tomar, que a priori el
inicio de camino es prometedor, pero ¿y el final? ¿Qué nos deparará el final? ¡Y
qué más da!
Esto lo saben muy bien los
montañeros. Os aconsejo, si tenéis la oportunidad, que escuches hablar alguna
vez estos “locos” explicando cómo lo importante de subir grandes picos no es en
llegar a la cumbre y mirar. Esa vista solo dura un instante, después se queda
en el recuerdo y te queda un vacio inmenso. Pero lo que realmente vale la pena,
es todo ese tiempo de disfrute que procede a la coronación de la cumbre. Ese
tiempo de preparación del viaje, y de recorrer el camino propiamente dicho. Ese
cumulo de sorpresas que te encuentras en el trayecto, y como las afrontas para
seguir adelante, haciendo lo que realmente te gusta.
Los montañeros sí que lo tienen
claro. El disfrute no está en llegar a lo más alto, sino en disfrutar el camino
mientras lo intentas.
Si todos tuviéramos esta visión
de la vida, conseguiríamos que desaparecieran la mayor parte de nuestros
miedos, y te darás cuenta que la única manera de no arriesgar en tu vida, es
hacer lo que realmente te apasiona.
Disfruta el video, y llega a la
cima de tu vida.
Hermosa enseñanza y gran estímulo.
ResponderEliminarNo estoy de acuerdo contigo, si que es importante el camino hasta la cima pero sin cima no tiene sentido el camino, y los que no consiguen la cima vuelven a hacer el camino hasta conseguirlo y lógicamente volverán a disfrutar con el camino desde que no lo consiguieron hasta que lo consigan. Y si alguien quiere saber que se siente, más que que hable con alguien que lo sienta, que lo vivencie, que salga de delante del pc o smartphone se vaya a la naturaleza y descubrirá la felicidad en su propia piel.
ResponderEliminarEs una opinión, no quisiera que te sintieses como si te faltase al respeto :)
Pienso que los objetivos cambian constantemente por lo cual si la busqueda de la felicidad es mediante la consecucion del objetivo, nunca seremos felices, tiene que ser al reves, conseguir que el objerivo sea alcanzar la felicidad.
ResponderEliminarUn artículo interesante, pero, a mi modo de ver, algo deslucido por la cantidad de faltas de ortografía que contiene (falta de palabras con tilde).
ResponderEliminarUn saludo,
Alex
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarMuchas gracias a todos por participar.
ResponderEliminarEn especial a Alex B., por mostrarme lo importante que es tener una buena ortografía. Intentare equivocarme menos en los siguientes artículos. Sin duda es una cosa que debo mejorar.
¡Gracias!